• Con el fin de sacar el máximo provecho a este dinero, el economista y catedrático universitario, Bernardo Cojal, brinda recomendaciones a quienes decidan retirar sus fondos.

Entre la necesidad inmediata o la seguridad futura. El 11 de abril, el Congreso de la República aprobó el dictamen que permite el retiro de hasta 4 UIT (S/ 20 600) de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), lo que genera preocupaciones en gran parte del sector Economía, sobre todo por el impacto negativo que podría tener en el sistema privado de pensiones.

Esto se debe, en cierta medida, a la elevada tasa de informalidad en el mercado laboral peruano, así como al número significativo de trabajadores independientes que contribuyen poco a estos fondos.

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Para el Dr. Bernardo Cojal Loli, docente de la Escuela Profesional de Economía de la Universidad César Vallejo (UCV), el retiro de este dinero se percibe como una medida que podría socavar las pensiones futuras. Esto implica, en efecto, reducir el monto de capital disponible para la jubilación, lo que resultaría en pensiones insuficientes o incluso inexistentes para muchos afiliados.

“Tanto el Banco Central de Reserva (BCR) como la Superintendencia de Banca, Seguros y Administradoras de Fondos de Pensiones (SBS) argumentan que los retiros de fondos perjudican a todos los ciudadanos peruanos, ya que las pensiones están diseñadas para proporcionar seguridad financiera durante la vejez. Estos retiros, que reducen el monto de las pensiones disponibles, ocasionarán pensiones más bajas de lo que actualmente se ofrecen, además de provocar otros efectos macroeconómicos adversos”, considera el economista.

Desde otra perspectiva, el Dr. Cojal menciona que “los inversionistas temen que una propuesta que permita a los peruanos acceder a sus ahorros para la jubilación, podría obligar a los fondos privados de pensiones a vender activos para tener hasta US$7000 millones disponibles para su retiro”.

Es importante que aquellos que opten por retirar sus fondos lo hagan con cautela. En lugar de gastar el dinero de inmediato, se sugiere considerar la posibilidad de utilizar una parte de los fondos como un capital inicial para iniciar un emprendimiento. Esto podría ayudar a generar empleo tanto en el ámbito familiar como en el social.

Recomendaciones para un buen manejo económico

Con el propósito de orientar a las personas que decidan retirar sus fondos, el catedrático de la carrera de Economía brinda recomendaciones para darle un buen uso a este dinero.

Evaluar necesidades urgentes versus necesidades futuras: antes de retirar los fondos, es crucial evaluar si realmente se necesitan de inmediato para cubrir necesidades financieras urgentes como gastos médicos o emergencias familiares. Sin embargo, es importante recordar que estos fondos están destinados para la jubilación.

Planificación financiera: esto implica establecer un presupuesto detallado. También se debe considerar la posibilidad de invertir parte de los fondos en instrumentos financieros que generen rendimientos adecuados a largo plazo, como fondos mutuos, acciones o bienes raíces.

Diversificación de inversiones: considerar diversificar las inversiones para aumentar el potencial de crecimiento a largo plazo. Esto podría incluir la inversión en diferentes clases de activos, regiones geográficas o sectores de la economía para reducir el riesgo y aumentar las posibilidades de obtener retornos más sólidos.

Asesoramiento financiero: buscar asesoramiento profesional puede ser una buena idea antes de tomar decisiones importantes. Un asesor financiero puede ayudar a evaluar la situación individual y ofrecer recomendaciones personalizadas para maximizar el uso de los fondos de manera responsable y beneficiosa.

Además, el Dr. Bernardo Cojal asegura que es importante tener la mayor cantidad de información posible antes de tomar cualquier decisión, así como desconfiar de las recomendaciones sobre negocios milagrosos. “Nada es fruto de la maravilla”, advierte.

En conclusión, el especialista en economía comenta que “según la perspectiva planteada por estos dictámenes, las AFP ya no cumplen su función original como sistema de pensiones, sino que se han convertido en un mecanismo de ahorro obligatorio sin una justificación sólida. Se argumenta que el Perú necesita una reforma del sistema de pensiones que garantice la seguridad económica en la vejez, pero sin depender exclusivamente de las AFP”.