Querida Doctora
Benemérito (25). Mi vida es un infierno casi desde que nací, como mi abuelo era policía a mi padre no se le ocurrió mejor idea que bautizarme como Benemérito, imagínese mi calvario. Desde que inicié el colegio fui víctima de bullyng por mi nombre y también por mi extrema delgadez, que mantengo hasta ahora, pero como hace poco me gradué de ingeniero civil, en la Notaría donde practicaba me subieron el sueldo y estoy muy contento, así que decidí invertir en mi cuerpo inscribiéndome en el gimnasio de mi barrio. Me compré todos mis implementos y el primer día reviví mis épocas escolares, sintiendo todas las miradas sobre mi huesuda humanidad, fue terrible.
Aunque soy un hombre valiente, mis ojos estaban a punto de explotar del llanto, pero seguía corriendo lentamente en la máquina caminadora hasta que sentí una mirada insistente y cuando volteo, una linda chica entradita en carnes que me estaba sonriendo, le devolví el amable gesto y seguí ejercitándome.
A punto de terminar, se me acercó la joven para conversarme animadamente, la verdad, yo no tengo experiencia amorosa, estoy cero kilómetros con la edad que tengo, pero Rebeca, me hizo sentir cosas lindas, estuvimos saliendo varios meses y ya estamos haciendo planes para mudarnos juntos.
Pero como cosa del destino, la otra noche en una de nuestras largas conversaciones, me confesó que la primera vez que me sonrió fue porque le di mucha lástima, yo reaccioné mal doctora, me sentí muy dolido y terminé en el acto con Rebeca, quien no ha bajado ni un gramo de peso y yo por supuesto sigo igual de escuálido.
Ella insiste en continuar la relación, pero yo no la miro igual, me siento muy dolido, no quiero la lástima de nadie, anhelo un amor verdadero, ¿qué me aconseja doctora? ¿Escucho lo que quiere decirme o ya no doy vuelta atrás? Estoy desesperado porque adoro a mi gordita.
Mira cariño
Déjate de tonterías y resentimientos. Eres un adulto y debes afrontar la situación, seguro no le permitiste terminar la idea a Rebeca, quien seguramente no quiere tener secretos contigo porque están pensando formar una familia, si dices que eres tan flaco y estabas a punto de llorar, ella demostró ser una mujer empática y sensible. Pídele disculpas y retoma tu relación para que formes un hogar feliz y de pasada si deseas puedes cambiarte el nombre notarialmente.